Una casa a reciclar de un frente muy acotado debería transformarse para alojar los diferentes rubros de esta pareja.
Un instituto bioquímico y un centro de kinesiología en un mismo lugar, con ingresos independientes y hasta un gimnasio reglamentario.
Se logro mas de lo que esperaba, ubicando cada ambiente como un rompecabezas, buscando siempre iluminar y ventilar. Un resultado sorprendente.